domingo, 9 de agosto de 2009

Mi primer viaje: Roma (VIII)

Me quedaban aun un par de días para seguir conociendo Roma, asique aproveché para dar un paseo por la Piazza Navona y sus alrededores, incluidos la Piazza della Rotonda en donde se encuentra el maravilloso Panteón de Agripa que no podéis dejar de visitar, el áerea Sacra Argentina, la piazza del Popolo, y varias galerías que me permitía visitar mi abono turístico.

Piazza del Popolo.
Llegaréis a esta plaza muy fácilmente con el metro.
En el centro de la plaza se encuentra un obelisco egipcio dedicado a Ramses II, que en la angitüedad se ubicaba en el Circo Máximo.















Piazza de España.
Se encuentra muy cerca de la Piazza del Popolo, a un par de metros andando.
Aunque os impresionen las escaleras, sentiréis el deseo de subir!, y de verdad que las vistas que tendréis desde allí de la ciudad merecerán mnucho la pena!.
Debajo tenéis la fuente de la plaza.























El áerea Sacra Argentina se encuentra muy cerca de la Piazza Navona, y es una zona de excavación arqueológica en la que podréis ver algunas construcciones interesantes de la época romana. Está abierta en plena calle a la vista de quien quiera visitarla, y aunque no se puede entrar, al estar
las excavaciones un par de metros por debajo de la altura de la calle podréis verlo todo sin problemas.
Cuidado en esta zona!, no me pareció que fuera muy segura, asique es mejor que vayáis de día.

Area Sacra Argentina. Roma. Septiembre de 2007.



















Otro lugar muy recomendable que no debéis dejar de visitar, es la Piazza de la Rotonda, muy cercana al área Sacra Argentina, asique podéis llegar a pie sin mayores problemas.
En esta plaza podréis disfrutar de unas las maravillas de la arquitectura romana: El Panteón de Agripa.
Agripa fue unos de los más íntimos amigos de Octavio, y luchó con él en la guerra contra Marco Antonio y Cleopatra. Ofreció su vida al servicio de la ciudad de Roma durante casi toda su vida, y honor a ello se construyó este panteón en su nombre.

Panteón de Agripa. Roma. Septiembre de 2007.
Lo primero que os llamará la atención del exterior es su planta circular.
















Interior del Panteón de Agripa.
El círculo abierto del techo os impresionará!.



La Piazza Navona fue mi siguiente destino. Os llamará la atención la cantidad de puestos de flores, pintores haciendo retratos y de cafeterías que encontraréis.
En la misma plaza tendréis la posibilidad de visitar un pequeño museo que os incluye el abono tuirístico. Es muy interesante, ya que podréis ver auténticas piezas encontradas en diferentes excavaciones.

Piazza Navona. Roma. Septiembre de 2007.














No, no es una estatua. Es uno de los numerosos mimos que podéis ver en la plaza!.















Diferentes piezas que podréis ver en el museo que se encuentra en la Piazza Navona. Esta visita está incluida en el abono turístico.


jueves, 6 de agosto de 2009

Mi primer viaje: Roma (VII)

Mi cuarto día en Roma lo dediqué a las termas de Caracalla. Es muy fácil llegar hasta ellas desde el circo romano, que se encuentra justo detrás del foro. Dejando el circo a vuestra derecha, justo en la esquina veréis un cruce enorme, donde convergen varias avenidas importantes de la ciudad, pues bien, deberéis coger la calle de vuetra derecha.
Tendréis que andar un poco, pero no os perderéis, porque si bien no las termas no están bien señaladas todo el mundo saben donde están!.

Os encontraréis con un complejo lleno de edificios, en algunos casos no en un buen estado de conservación, pero que desde mi punto de vista merece la pena visitar, ya que es unas de las termas mejor conservadas de toda Roma.
Lo que hoy podemos contemplar es lo que se ha mantenido en pie después de un enorme terromoto en el año 847, aunque el edificio ya no se utilizaba desde hacía tiempo, debido a que los conductos de agua habían sido dañados en una guerra.
Desde edad muy temprana fue despojado de las esculturas que contenía en su interior, pero hoy en día podemos disfrutar de unos mosaicos en un perfecto estado.


Termas de Caracalla. Septiembre de 2007.
Sin duda, os sentiréis muy pequeños!!.

Esta es una pequeña muestra del arte romano que podréis encontrar allí... Se mantiene en perfecto estado de conservación.

















Encontraréis restos de mosaicos...














Aquí estoy yo!.



















Mi siguiente destino fueron las catacumbas de San Sebastiano. Se encuentran a las afueras de Roma, y deberéis coger un autobús para llegar hasta allí.
Pero creedme que merece la pena!.
Desde las termas de Caracalla, deberéis seguir la calle, dejando las termas a vuestra derecha y el circo romano detrás. Llegaréis a un cruce, cruzad la calle, y cerca de la esquina hay una parada de autobús que os dejará justo en frente de las catacumbas.
En cualquier caso, es mejor que consultéis nla guía de autobuses de Roma para evitar el perderos.

Existe una inumerable cantidad de catacumbas en Roma, como la de San Sebastián, la de San Calixto... entre otras, y seguramente a fecha de hoy aun quedan muchas por descubrir.
Yo elegí la de San Sebastiano porque era día martes y era la única que estaba abierta... no voy a engañar a nadie.
Los días de apertura varían mucho de unas catacumbas a otras, y mientras unas cierran los miércoles, otras lo hacen los jueves., etc.
Una manera de saber cuando están abiertas es llevando a mano un libro turístico de Roma..., aunque en la puerta de las catacumbas os lo informan, es para que no os hagáis el camino en balde...

La más famosa es la de San Calixto, pero la de San Sebastiano es la única que tiene varias plantas, aunque solo podréis visitar la segunda, que es la que está abierta al público.

Fue una visita que realmente me impactó. Era la primera vez que estaba en unas catacumbas, y su estructura laberíntica, sus techos bajos, la humedad... me hicieron tener una sensación extraña.
Consejo: llevaros una chaqueta!, en las catacumbas la temperatura con respecto al exterior varía mucho.

Las catacumbas de San Sebastiano, como la mayoría de las catacumbas, son laberínticas ya que una multitud de pasillos se entrelazarán los unos con los otros, hasta tal punto que ya no encontraréis la salida.
Los pasillos son estrechos, apenas cabe una sola persona, y los techos son muy bajos, por lo que algunos tramos tendréis que agachar la cabeza, para que os déis una idea yo mido un 1.70 m. Sin embargo, estos pasillos, pese a su estrechez, están muy ventilados. Aunque desde mi punto de vista no apto para claustrofóbicos!.

En algunas zonas los pasillos se agrandarán y formarán pequeñas salas. Es aquí donde podréis contemplar pinturas de la época romana, realizada por los cristianos de la época.

En las paredes de los pasillos podréis ver los huecos donde se enterraban a los muertos, acompañados de incripciones que databan de la fecha de la muerte.

Pero no os preocupéis, siempre iréis acompañados de un guía, ya que está totalmente prohibido bajar a las catacumbas por tu cuenta.
Existen guías que hablan varios idiomas, y por supuesto, el español es uno de ellos...
Está totalmente prohibido sacar fotos dentro de las catacumbas, asique me he tenido que bajar algunas fotos de internet para poderlas enseñar!.

Catacumbas de San Sebastián. Origen de la fotografía: Google Images.
En los huecos que podréis ver en la foto, se colocaban las urnas funerarias. Aunque evidentemente podéis encontrar huecos de todos los tamaños, ya que en la mayor parte de las ocasiones enterraban cuerpos enteros.
Los huecos se hacían excavando directamente sobre la pared. Cuando ya no había más espacio, se decidía construir otro nivel más. Hasta 4 niveles podréis encontrar en las catacumbas de San Sebastián, aunque únicamente visitaréis el segundo.















Catacumbas de San Sebastián. Origen fotografía: Google Images.
Esta es una de las últimas salas que visitaréis, se trata de un panteón familiar muy bien conservado.
San Sebastián dejó de utilizarse cuando el cristianismo pasó a ser una religión "legal" en Roma. Esta catacumba cayó en el olvido, hasta que la vieja iglesia que se había contruuido justo encima necesitó una reforma, y durante los trabajos de reconstrucción se derrumbó parte del suelo, dejando al descubierto este panteón familiar.
Desde entonces se comenzó a excavar hasta descubrir los 4 pisos, aunque en ningún momento veréis restos, ya que todos han sido trasladados a los pisos no abiertos al público.
A lo largo de la caminata que daréis por las catacumbas, podréis comprobar como ésta se fue adaptando a las diferentes necesidades de crecimiento, de ahí su estructura sin control, en forma de laberinto.
Cuando termina la visita tendréis la posibilidad de conocer la Iglesia de San Sebastián.










Si no pudistéis sacar fotos, no os preocupéis, al terminar la visita tendréis la posibilidad de comprar postales muy baratas!.

Mi última parada del día, fue la iglesia San Pietro in Vincoli. Seguramente no os sonará de nada, pero si os digo que aquí se encuentra la sepultura del Julio II realizada por Miguel Angel, cuyo conjunto escultórico está formado por el Moisés, Raquel y Lia, quizás os ayude un poco...
Si, yo no tenía ni idea de donde se encontraba el Moisés de Miguel Angel, pero esta iglesia me figuraba como un punto turístico importante en la ciudad. Asique decidí visitarla para ver que podía encontrar... y vaya con lo que encontré!.

Esta dando un paseo por la iglesia, hasta que distraídamente levanté la cabeza y pude ver con mis propios ojos, delante de mis narices esto:

Me quedé pasmada... no me lo esperaba!. Un regalo más que Roma me tenía preparado!.

Conjunto escultórico de la sepultura de Julio II. Roma. Septiembre de 2007.

Para llegar hasta la iglesia, deberéis llegar hasta la estación de metro de "Colisseo", seguir la calle Vía della Polveriera, que se encuetra justo detrás de la estación, deberéis subir unas escaleras para subir hasta esta calle. Después esta calle se terminará y solo os permitirá girar a la izquierda. Continuaréis por ella hasta que llegaréis a una plaza con una iglesia. Pues ya habéis llegado!!.

martes, 4 de agosto de 2009

Mi primer viaje: Roma (VI)

Recorrer la ciudad a pie es una de las mejores cosas que se pueden hacer en Roma, pese al calor que hacía compensó!.
En mi cuarto día en la ciudad italiana visité varias iglesias y plazas, aquí os dejo una pequeña muestra:

Archibasílica de San Juan de Letrán. Septiembre de 2007.
Llegar hasta aquí es fácil, aunque desde la salida de metro S. Giovani (línea A) os tocará andar un poquito.
La fachada bastante austera, guarda en su interior una iglesia sumamente recargada en su interior. Ni un centrímetro de las paredes ni del techo se han edjado sin pintar.
La Arhibasílica de San Juan de Letrán es la Catedral de Roma, donde se encuentra la sede episcopal del Obispo ed Roma.
Nuevamente os recuerdo la importancia de ir edcentemente vestidos si queréis entrar. Si os habéis olvidado de ello, no os preocupéis, junto en la cera de en frente hay un vendedor de pañuelos grandes, con los que os podéis cubrir.














Interior de la Basílica.




















Justo en frente de la Basílica, tendréis la posibilidad de poder entrar a una iglesia, en la cual se encuentra la escalera santa. No se puede subir por ella de pie, sino de rodillas. Y os puedo asegurar que se os pondrá la piel de gallina al contemplar la devoción de os creyentes subiendo de rodillas...
Ojo con los carteristas en esta iglesia!, no os fieis incluso al estar dentro de ella, porque es precisamente donde suelen estar, aprovechándose del turista despistado...


La Basílica de Santa María la Mayor. Es una basílica preciosa, tanto por fuera como por dentro. Es muy fácil llegar hasta aquí desde la Plaza de Victor Emmanuel, donde además podréis encontrar algunas ruinas romanas en mitad de la plaza.
Aprovecho en este apartado, para deciros que tengais mucho cuidado en la plaza de Victor Emmanuel, no es un lugar muy seguro: gente tirada en el suelo bebiendo, mendigando, carteristas, jóvenes con unas rayitas de mas... serán vuestros compañeros. Mucho cuidado!.
Por fuera, os llamará mucho la atención la enorme torre que la preside y el pórtico de la entrada.

Santa María la Maggiore. Septiembre de 2007.

Por dentro, os llamará la atención el artesonado del techo, la simetría de las 3 plantas ,el decorado tan recargado: dorados, pinturas... la cúpula, las esculturas que encontraréis allí... No dejéis de contemplar el rosetón, que aunque no es de gran tamaño los colores son impresionantes!.
Una iglesia que os encantará conocer!, merecerá mucho la pena!.

Interior de Santa María la Maggiore. Roma. Septiembre de 2007.

Interior de Santa María la Maggiore. Roma. Septiembre de 2007.

A modo de información, os indico que en la nave derecha de la iglesia, hacia el centro más o menos, encontraréis un servicio muy limpio y en excelentes condiciones. A mí me vino muy bien... :P


Vista de la cúpula de Santa María la Maggiore. Roma. Septiembre de 2007.

Otro punto importante de la ciudad es la Piazza de la República, llegaréis muy fácilmente desde Santa María la Maggiore.
Lo más destacable de esta plaza es la iglesia que se encuentra justo en frente, Santa María degli Angeli, y que es muy famosa porque la fachada reutilizó una antigua muralla romana.
Además, en su interior, podréis ver un auténtico reloj que anuncia los equinocios!.

Piazza de la República.
Es muy fácil de llegar, os tendréis que bajar en la estación "Repubblica".
Por otro lado, podréis aprovechar la caminata para conocer algunas ruinas romanas que hay muy cercanas a la plaza, y que se encuentran en plena calle.
Antiguamente, se hallaban unas termas romanas muy famosas, las termas de Dioclesiano, y que se encontraban a escasos metros de lo que hoy es la plaza.
Fueron unas termas muy importantes en la época romana, de las que únicamente se conservan algunos muros y pequeños restos arqueológicos que podréis visitar en el museo.










Santa María degli Angeli
. Roma. Septiembre de 2007.
Quizás en la foto no se aprecia muy bien, pero la fachada de la iglesia está totalmente cóncava, debido a que el arquitecto que diseño la iglesia aprovechó unas antiguas murallas romanas pertenecientes a las termas de Dioclesiano.
















Interior de Santa María degli Angeli.
Aquí podréis ver el reloj del que os hablé antes.
El sol entra por una pequeña apertura en la parte superior de la iglesia, y cuando se produce el equincio, la luz del sol se proyecta sobre el suelo y sigue la línea del reloj.
Yo no tuve la suerte de poder contemplarlo, pero dentro de la iglesia hay fotos, y por lo que se ve es un auténtico espectáculo...












Las termas de Dioclesiano están un poco escondidas, y dado que casi no se conserva casi nada de ellas, no se incluyen en las guías turísticas.
Si habéis adquirido el bono para visitar varios recintos arqueológicos, unas de las atracciones que podréis ver son las termas de Dioclesiano.
Para poder llegar hasta ellas desde la plaza de la República, tendréis que dejar la iglesia de Santa María degli Angeli a vuestra izquierda y caminar dirección estación "Termini", sabréis donde está porque es la estación más famosa de Roma y se encuentra bien señalada.
La entrada a las termas está justo en frente de la estación.
Cuidado con esta zona!!!!, hay mucho carterista...

Termas de Dioclesiano. Septiembre de 2007.



















Actualmente, lo poco que ha quedado de las termas se ha convertido en un museo para exponer las piezas que se han ido encontrado en las diferentes excavaciones que se han realizado en la zona.
Independientemente del gran número de objetos que se han hallado, el que a mí más me ha llamado la atención es un armadura auténtica romana!!!. Está casi entera, y al verla siempre me he preguntando sobre el enorme peso que los soldados romanos debían llevar encima...

Armadura romana en las termas de Dioclesiano. Septiembre de 2007.
Aquí podréis comprobar como la armadura está casi entera, tal y como se encontró en su momento.
El casco, la armadura, parte del cinturón (segunda pieza alargada contando por abajo) y la espada.
A la derecha se puede ver una pieza con forma triangular, creo recordar que eso era parte de un hacha, aunque el palo de madera no se conservó.
Las pequeñas piezas de la derecha me parecen que eran cuchillos, y lo que se puede ver a la izquierda servía para sujetar la capa.
La pieza circular no recuerdo para que servía, alguien me lo puede decir?¿.

Tendría los soldados romanos, de verdad, esa tableta de chocolate o diseñan las armaduras así para fardear frente al enemigo?¿...














Entrada a las termas de Dioclesiano. Septiembre de 2007.
Todas las piezas que encontraréis en este museo son auténticas y fueron encontradas en las excavaciones realizadas en las termas.











Y por último, aquel día decidí visitar la famosa Fontana de Trevi. Os daré un premio si conseguís sacaros una foto sin estar rodeados de turistas!!!.
No olvidéis echar una moneda a la fuente estando de espaldas..., aunque si os sirve de consuelo, el deseo que pedí yo nunca se cumplió... :P

La Fontana de Trevi. Septiembre de 2007.
Aquí se filmó la famosa escena de la Dolce Vita.
Llegar hasta aquí es muy fácil, está muy señalizada en todos los mapas turísticos, aunque si decidís llegar en metro o en autobús os tocará andar, porque la zona es peatonal. Pero el recorrido merece mucho la pena, las tiendas cercanas son preciosas y el bullicio de la gente hace compañía...














Yo en la Fontana de Trevi.
Aproveché un segundo en el que no pasaban turistas para pedirle a un matrimonio alemán que me sacara una foto.
Recuerdo el gesto de extrañeza que me pusieron cuando les pedí que me fotografiaran... es que es tan raro ver a una chica viajando sola?¿..., vaya!, se me había olvidado que no todo el mundo tiene la suerte de viajar con amigos o pareja como hacian ellos...
Lo de siempre... oidos sordos a miradas juiciosas... de todos modos, yo me saqué la foto!, y que me quiten lo bailado!.