Con mis compañeros de China yo hablaba muy poco.
La verdad es que los chinos en Irlanda apenas se relacionaban con los nacionales. Y eso cabreaba mucho a los irlandeses.
Los chinos tenían muy mala reputación en Irlanda: no se relacionan, no aprenden ingles, no quieren conocer nuestras costumbres, son sucios, maleducados... era lo que más escuchaba.
Pero en mi clase de ingles avanzado había un malasio que era todo un personaje!.
Se llamaba Johnny, o así se hacía llamar. Llevaba varios años viviendo en Irlanda y trabajaba en un Take away del centro de Dublin.
Tenía unos 25 años más o menos y le encantaba la moda. Siempre iba a clase con lo ultimo de lo ultimo: pantalones bajos, zapatillas de marca, anillos, pulseras, collares, pendientes, gafas de sol, gorra, chaqueta de marca... y todo ello puesto a la vez.
Esta imagen es la más parecida que he encontrado con la vestimenta de Johnny. (Este chico no es Johnny)
Era un chico verdaderamente encantador. Yo me llevaba muy bien con él.
Vivir en Irlanda no le terminaba de convencer, y seguramente en un futuro no muy lejano volvería a Malasia con su familia.
Siempre con una sonrisa, animando a todos los compañeros, siempre haciendo el payaso para hacernos reir, le gustaba tomarle el pelo a la profesora haciéndole preguntas sin sentido y respondiendole a ésta cosas más absurdas aún.
La profesora se partía de risa con él. Y nosotros también.
Los días que Johnny no venía a clase le extrañaba.
Por eso, y porque era un bellísima persona, he querido escribir un post en mi blog exclusivo para él.
viernes, 11 de abril de 2014
miércoles, 2 de abril de 2014
Dublin y mis clases de inglés...
Al contrario que en el nivel anterior, parece que el avanzado me anima y me motiva!.
Mi profesora es de Irlanda del Norte, y eso se nota en el acento: es más cerrado y cuesta bastante entenderlo.
Mis compañeros parece que siguen la clase, a mí me cuesta un poco por mis problemas de comprensión.
Sin embargo, esta profesora practicamente no utiliza el libro, y siempre se está inventando juegos y actividades divertidas.
Nos hizo leer un texto sobre la vida de Enrique VIII, un personaje histórico sumamente interesante, y precisamente por ello, me hizo esforzarme aún más en comprender lo que estaba leyendo.
Cuando lo que lees no te interesa demasiado, pones poco interés...
Debatimos sobre la vida de Enrique VIII: sobre sus numerosas esposas, su manera de entender la vida, la muerte, los castigos... La profesora intentó convencernos de que en realidad, Enrique VIII no era tan malo, simplemente tenía una vision distinta de las cosas... Ahi es nada!.
Hicimos un ejercicio de preguntas, de debate entre nosotros, y esto hacía la clase muy amena y divertida.
Hubo otro día en que nos hizo hacer una lista de cosas que hacíamos al día y la duración de las mismas. Llegamos a la conclusion de que, siguiendo nuestros calculos matemáticos, nuestros días tenían unas 32 horas más o menos...
Yo iba a clase con muchas ganas, porque nunca hacíamos lo mismo. Yo soy una persona que aprende mucho jugando, y esta clase era el molde de mi zapato!.
Hasta los chinos, que siempre pasaban de todo, siempre estaban entusiasmados!.
Por mi parte, aunque siempre pasaba mis examenes con buenas nota, este curso parece que la cosa va más ajustada a la realidad: apruebo si, pero no con las notazas de cursos anteriores.
Eso quería decir que este nivel era el mío.
Pese a todo, yo seguía con auténticos problemas de comprensión...
Mi profesora es de Irlanda del Norte, y eso se nota en el acento: es más cerrado y cuesta bastante entenderlo.
Mis compañeros parece que siguen la clase, a mí me cuesta un poco por mis problemas de comprensión.
Sin embargo, esta profesora practicamente no utiliza el libro, y siempre se está inventando juegos y actividades divertidas.
Nos hizo leer un texto sobre la vida de Enrique VIII, un personaje histórico sumamente interesante, y precisamente por ello, me hizo esforzarme aún más en comprender lo que estaba leyendo.
Cuando lo que lees no te interesa demasiado, pones poco interés...
Debatimos sobre la vida de Enrique VIII: sobre sus numerosas esposas, su manera de entender la vida, la muerte, los castigos... La profesora intentó convencernos de que en realidad, Enrique VIII no era tan malo, simplemente tenía una vision distinta de las cosas... Ahi es nada!.
Hicimos un ejercicio de preguntas, de debate entre nosotros, y esto hacía la clase muy amena y divertida.
Hubo otro día en que nos hizo hacer una lista de cosas que hacíamos al día y la duración de las mismas. Llegamos a la conclusion de que, siguiendo nuestros calculos matemáticos, nuestros días tenían unas 32 horas más o menos...
Yo iba a clase con muchas ganas, porque nunca hacíamos lo mismo. Yo soy una persona que aprende mucho jugando, y esta clase era el molde de mi zapato!.
Hasta los chinos, que siempre pasaban de todo, siempre estaban entusiasmados!.
Por mi parte, aunque siempre pasaba mis examenes con buenas nota, este curso parece que la cosa va más ajustada a la realidad: apruebo si, pero no con las notazas de cursos anteriores.
Eso quería decir que este nivel era el mío.
Pese a todo, yo seguía con auténticos problemas de comprensión...
Etiquetas:
Vivir solo Dublin Irlanda
Suscribirse a:
Entradas (Atom)